Visita Varna en tu viaje a Bulgaria
Varna es la tercera ciudad de Bulgaria, después de Sofía y Plovdiv.
Está ubicada en la costa del Mar Negro, en la desembocadura de un fértil valle sobre un istmo arenoso entre el lago homónimo y el mar, en posición resguardada de los vientos del norte, Varna ha tenido un notable desarrollo debido al incremento demográfico registrado desde principios del siglo XX.
Es el puerto comercial más importante del país, en comunicación con el Danubio. Es una notable ciudad industrial, con fábricas metalúrgicas, mecánicas, químicas, alimenticias, textiles y de curtidos, así como frecuentado centro turístico, con una de las playas más elegantes del Mar Negro.
La Perla del Mar Negro, era la estación preferida de los reyes de Bulgaria, cuya residencia de Euksinovgrad fue recuperada por Todor Zhivkov.
Ciudad mucho más despejada y más simpática, con un centro peatonal muy centroeuropeo que desciende hacia la playa por un inmenso jardín marítimo.
En verano, Varna se transforma en una pequeña California.
La Catedral de la Asunción, construida en 1886 según el modelo de la catedral de San Petersburgo.
El teatro de la Ópera es la fachada roja tipo Belle Époque en la plaza Nezavisimost, con su interior completamente renovado.
El Museo Etnográfico es uno de los mejores de Bulgaria, en una bonita casa bien acondicionada.
El Museo del Renacimiento Nacional, a 100m de la plaza Ekzarh losif, en el nº 9 de la calle 27 de julio.
Una vieja casa, la escuela más antigua de Varna desde el Renacimiento búlgaro, con un bonito jardín. En la planta baja se conserva un aula antigua y, al lado, una capilla secreta bajo la protección del arcángel san Miguel.
El Museo Arqueológico es el mayor museo de la ciudad, con unas joyas de oro que quizá sean las más antiguas del mundo, pues algunas datan de hace más de 6.000 años.
El Museo de la Marina está cerca de la playa municipal, en su jardín se encuentra el Intrépido, célebre por haber hundido el crucero turco Hamidia en 1912.
También se encuentran en Varna el Museo de la Medicina, desconcertante y ligeramente macabro; el Acuario y el Delfinario.
La mayoría de los restaurantes se ubican en los bulevares Knyaz Boris I y Slivnitsa, igual que en el paseo a lo largo de la playa.
Se consiguen cafés y bares de copas con terrazas a la sombra en la plaza Nezavisimost, en los grandes bulevares y a lo largo del paseo de la playa.
En verano el mejor ambiente de fiesta se consigue en las discotecas de la playa.
Varna tiene una Estación Marítima en el puerto.
La Estación Ferroviaria se ubica en la parte baja de la ciudad, cerca del puerto.
La Estación de autobuses esta en las afueras de la ciudad, se toman los autobuses nº 22, 40 y 51 delante de la catedral.
También aquí se toma el autobús nº 50 que lleva al Aeropuerto a unos 8km de Varna.
El litoral norte es más frecuentado por los turistas, lo que explica las diversas infraestructuras abiertas en las grandes estaciones como Druzhba, Albena y las Arenas de Oro.
Por el contrario el extremo llamado costa de los Acantilados, se ha mantenido casi intacto. Los paisajes son magníficos.
Algunos campings muy tranquilos en Durankulak, Shabla.
En algunos rincones, restos de torres y cubas petroleras abandonadas. No debe dejarse de ver el cabo Kalyakra, cerca de Kavarna, una pequeña carretera conduce hasta este acantilado calcareo.
Un café restaurante integrado en el lugar, vale la pena la visita.
A unos 20 kms al noreste de Varna, cerca de la estación balnearia de las Arenas de Oro, se encuentra el Monasterio Rupestre de Aladzha. Fundado en el siglo V, el monasterio está compuesto de grutas talladas en la roca.
En el piso inferior se pueden ver los restos de la iglesia y algunas celdas con frescos mal conservados. Por encima hay otras celdas, también un pequeño museo. Visita muy original y apacible, en la tranquilidad del bosque.
Está ubicada en la costa del Mar Negro, en la desembocadura de un fértil valle sobre un istmo arenoso entre el lago homónimo y el mar, en posición resguardada de los vientos del norte, Varna ha tenido un notable desarrollo debido al incremento demográfico registrado desde principios del siglo XX.
Es el puerto comercial más importante del país, en comunicación con el Danubio. Es una notable ciudad industrial, con fábricas metalúrgicas, mecánicas, químicas, alimenticias, textiles y de curtidos, así como frecuentado centro turístico, con una de las playas más elegantes del Mar Negro.
La Perla del Mar Negro, era la estación preferida de los reyes de Bulgaria, cuya residencia de Euksinovgrad fue recuperada por Todor Zhivkov.
Ciudad mucho más despejada y más simpática, con un centro peatonal muy centroeuropeo que desciende hacia la playa por un inmenso jardín marítimo.
En verano, Varna se transforma en una pequeña California.
¿Qué visitar en Varna?
La Catedral de la Asunción, construida en 1886 según el modelo de la catedral de San Petersburgo.
El teatro de la Ópera es la fachada roja tipo Belle Époque en la plaza Nezavisimost, con su interior completamente renovado.
El Museo Etnográfico es uno de los mejores de Bulgaria, en una bonita casa bien acondicionada.
El Museo del Renacimiento Nacional, a 100m de la plaza Ekzarh losif, en el nº 9 de la calle 27 de julio.
Una vieja casa, la escuela más antigua de Varna desde el Renacimiento búlgaro, con un bonito jardín. En la planta baja se conserva un aula antigua y, al lado, una capilla secreta bajo la protección del arcángel san Miguel.
El Museo Arqueológico es el mayor museo de la ciudad, con unas joyas de oro que quizá sean las más antiguas del mundo, pues algunas datan de hace más de 6.000 años.
El Museo de la Marina está cerca de la playa municipal, en su jardín se encuentra el Intrépido, célebre por haber hundido el crucero turco Hamidia en 1912.
También se encuentran en Varna el Museo de la Medicina, desconcertante y ligeramente macabro; el Acuario y el Delfinario.
La mayoría de los restaurantes se ubican en los bulevares Knyaz Boris I y Slivnitsa, igual que en el paseo a lo largo de la playa.
Se consiguen cafés y bares de copas con terrazas a la sombra en la plaza Nezavisimost, en los grandes bulevares y a lo largo del paseo de la playa.
En verano el mejor ambiente de fiesta se consigue en las discotecas de la playa.
Varna tiene una Estación Marítima en el puerto.
La Estación Ferroviaria se ubica en la parte baja de la ciudad, cerca del puerto.
La Estación de autobuses esta en las afueras de la ciudad, se toman los autobuses nº 22, 40 y 51 delante de la catedral.
También aquí se toma el autobús nº 50 que lleva al Aeropuerto a unos 8km de Varna.
El litoral norte es más frecuentado por los turistas, lo que explica las diversas infraestructuras abiertas en las grandes estaciones como Druzhba, Albena y las Arenas de Oro.
Por el contrario el extremo llamado costa de los Acantilados, se ha mantenido casi intacto. Los paisajes son magníficos.
Algunos campings muy tranquilos en Durankulak, Shabla.
En algunos rincones, restos de torres y cubas petroleras abandonadas. No debe dejarse de ver el cabo Kalyakra, cerca de Kavarna, una pequeña carretera conduce hasta este acantilado calcareo.
Un café restaurante integrado en el lugar, vale la pena la visita.
A unos 20 kms al noreste de Varna, cerca de la estación balnearia de las Arenas de Oro, se encuentra el Monasterio Rupestre de Aladzha. Fundado en el siglo V, el monasterio está compuesto de grutas talladas en la roca.
En el piso inferior se pueden ver los restos de la iglesia y algunas celdas con frescos mal conservados. Por encima hay otras celdas, también un pequeño museo. Visita muy original y apacible, en la tranquilidad del bosque.